Ducati Scrambler 800 vs. Husqvarna Svartpilen 801 en comparación

Imagínate estar siete días en los Balcanes. No en un cómodo autobús turístico, ¡oh no! Estás sentado en el sillín de una moto que te lleva a través de cuatro países, desde las estrechas calles de Budapest hasta las impresionantes costas del Adriático. ¡Más de 2500 kilómetros de pura euforia motociclista! ¿No suena como el sueño húmedo de cualquier entusiasta de las dos ruedas? Exactamente eso es el Rally de los Balcanes, y aquí hemos probado, entre otras, dos motos que no podrían ser más diferentes pero que igualmente nos han encantado: La Ducati Scrambler 800 ICON y la Husqvarna Svartpilen 801.

¿Qué es el Balkan Rally?

El Balkan Rally no es un tour en moto convencional, sino una mezcla de aventura, encanto retro y disfrute exclusivo. Originalmente concebido para automóviles clásicos, el evento se ha abierto a lo largo de los años también a motocicletas clásicas y motos retro. La salida se da tradicionalmente en Budapest, desde donde los participantes recorren rutas pintorescas a través de los Balcanes hasta la costa en la región de Kotor. Los organizadores apuestan por el máximo confort: las etapas siempre terminan en hoteles seleccionados y lujosos. Acompañados de un espresso-móvil y degustaciones de champán y vino por la noche, el rally ofrece un programa elegante que fomenta el intercambio con entusiastas de automóviles y motocicletas. Pero eso no es todo: durante las etapas diarias, los participantes deben determinar su tiempo de llegada resolviendo acertijos y superando desafíos fotográficos. Conducir demasiado rápido o demasiado lento implica puntos de penalización, por lo que se trata de encontrar el equilibrio perfecto. A pesar del enfoque automovilístico del rally, los motociclistas se sienten bienvenidos, ya que la atmósfera relajada y las diversas tareas hacen que el rally sea una experiencia única que va más allá de un tour ordinario. También en 2025, el Balkan Rally presentará nuevas rutas y desafíos: un evento que debería estar en la lista de deseos de todo amante de las motos retro.

Aquí más información sobre el rally.

El equipamiento del equipo 1000PS para el Balkan Rally 2024

Todo el equipo optó por ropa de estilo retro de Held para el viaje. Cabe destacar las zapatillas Sirmione Gore Tex o la impresionante chaqueta de cuero Jester.

Utilizamos la misma solución de equipaje para todas las motos: la bolsa trasera Legend Gear de SW-Motech. Ofrece múltiples opciones de fijación y es muy económica y compacta. ¡La bolsa tuvo que soportar casi 3.000 km en 8 motos diferentes bajo condiciones climáticas adversas!

Antes del rally, impregnamos bien nuestra ropa con el spray PROTEX de MOTOREX. Durante el rally, utilizamos los pequeños y recargables sprays de cadena mini de MOTOREX.

La comunicación funcionó muy bien esta vez. Todo el equipo estaba conectado con dispositivos Cardo Packtalk. Las baterías duraron todo el día y los dispositivos eran 100% impermeables. La calidad de sonido fue excelente, y la combinación de "indicaciones de navegación" + "música" + "comunicación" funcionó sin problemas. Incluso las llamadas telefónicas ocasionales no sobrecargaron el sistema. ¡Gran recomendación para grandes aventuras en grupo!

Todo el equipo optó por el casco HJC V10. El casco ofrece múltiples opciones de diseño y combinó maravillosamente con nuestras hermosas motocicletas. En el largo tour, disfrutamos de la alta comodidad de uso.

Para la navegación, teníamos roadbooks proporcionados por la dirección de la carrera. Sin embargo, intentamos trazar el recorrido de la ruta lo más exactamente posible con Calimoto. En el viaje a Budapest y especialmente en el regreso desde Kotor, optamos por la opción "más rápida" de autopista debido al clima. Quien desee seguir la ruta en buen clima, debería ajustar los deslizadores en Calimoto para estos tramos a "curvado". Aquí el enlace al recorrido aproximado de la ruta.

El equipo 1000PS en el Balkan Rally 2024

• Amelie
• Mex
• Poky
• Philipp
• Carlos
• Marcel
• Wolfgang Weiß
• Micha
• Nils

Echemos un vistazo a nuestros protagonistas. En una esquina tenemos la Ducati Scrambler 800 ICON. Imagina que Sophia Loren fuera una moto: seductora, clásicamente hermosa y con un toque de Dolce Vita. En la otra esquina está la Husqvarna Svartpilen 801, una moto que parece haber sido soldada por el propio Thor en su tiempo libre: angulosa, musculosa y con el encanto de un dios nórdico. La Ducati, con su motor V2 de 803 ccm, ronronea como un gato satisfecho y entrega 73 CV. La Husqvarna, en cambio, ruge con su bicilíndrico en línea de 799 ccm y 105 CV como un león enfurecido. Aquí ya queda claro: estamos tratando con dos caracteres completamente diferentes.

Antes de descender a las profundidades de las impresiones subjetivas, echemos un vistazo a los hechos concretos. La Ducati pesa 188,5 kg, mientras que la Husqvarna con 189,5 kg es solo un sándwich más pesada. La altura del asiento de la Ducati es de 795 mm, la de la Husqvarna es de 820 mm. Ambas motos están equipadas con sistemas modernos de asistencia a la conducción. ¿Control de tracción dependiente de la inclinación? ¡Chequeado! ¿ABS en curvas? ¡Chequeado! La Husqvarna además cuenta con un quickshifter de serie, mientras que en la Ducati hay que desembolsar 267 euros adicionales. La suspensión delantera en la Ducati está a cargo de una horquilla Kayaba USD de 41 mm con 150 mm de recorrido, mientras que la Husqvarna viene con una horquilla WP USD de 43 mm y 140 mm de recorrido. En la parte trasera, ambas utilizan un monoamortiguador con 150 mm de recorrido. ¿La diferencia? En la Husqvarna puedes ajustar la compresión y el rebote, en la Ducati tienes que conformarte con lo que hay.

¡Ahora se pone emocionante, amigos! Porque, ¿de qué nos sirven los mejores datos técnicos si la moto se siente como un burro testarudo? Empecemos con la ciudad. Aquí es donde la Ducati Scrambler está en su elemento. Es tan ágil como un gato con cafeína y transmite una sensación de ligereza que roza la magia. Nasty Nils (o sea, yo) lo ha resumido perfectamente: "En cuanto te subes, el pulso baja como 10 a 15 latidos por minuto." Es como si la Scrambler dijera: "Relájate, amigo. Yo me encargo de todo."

¿Y la Husqvarna? Bueno, tampoco es un elefante en la ciudad. Mex, uno de nuestros pilotos de prueba, la describe como "muy, muy ágil" en el tráfico urbano. Pero tiene ese tono ligeramente agresivo, como si dijera: "Sí, puedo curvear por callejones estrechos. Pero en realidad quiero salir al campo y darlo todo."

Hablando del campo: Aquí es donde la Svartpilen muestra de qué está hecha. Su motor es una verdadera bestia. Mex se entusiasma: "En el rango de 5000 a 8000 revoluciones tiene una zona media realmente potente, mucho torque." Es como tener un coche deportivo bajo el trasero, solo que sin el molesto techo. ¿La Scrambler? También se defiende bien en carreteras secundarias, pero es más un cruiser vivaz que un cazador de curvas potente.

Pasemos a la autopista, el lugar donde las motos se convierten en estrellas de la carretera o en instrumentos de tortura azotados por el viento. La Husqvarna sorprende positivamente aquí. A pesar de su desnudez, se mantiene estable, incluso a velocidades más altas. ¿La Ducati? Bueno, digamos que con viento en contra a veces te sientes como un velero en medio de los vientos de Bora en el Adriático. Es vivaz, es ágil y a alta velocidad también un poco nerviosa.

En una rally de 2500 kilómetros, el asiento se convierte en tu mejor amigo o en tu peor enemigo. La Ducati Scrambler lleva la delantera aquí. Es el sillón cómodo entre las motos. Incluso después de horas de conducción, te sientes como si acabases de recibir un masaje, ¡si te gustan los asientos suaves!

¿La Svartpilen? Bueno, es más bien el asiento deportivo entre las motos. Deportivo y firme, pero aún así apto para largas distancias, como destaca Mex. El ángulo de la rodilla está diseñado de tal manera que también se pueden soportar bien las etapas largas. La Husqvarna se siente más deportiva, directa y precisa. Los compañeros cómodos preferirán la Ducati.

Ah, llegamos al corazón de cada moto: el motor. La Ducati con su V2 es como un buen vino añejo – suave, cultivado y con la cantidad justa de empuje. Puede que tenga "solo" 73 CV, pero estos se entregan de manera tan fluida que uno se siente como el rey de la carretera. ¿Y la Husqvarna? Su bicilíndrico en línea es como un trago de tequila – pega fuerte y te deja con ganas de más. Con 105 CV, tiene claramente más empuje, y eso se nota. Valentin Pokorny se sorprendió por la elasticidad del motor: "Me sorprendió lo elástico que es el motor, con qué bajas revoluciones se puede mover el bicilíndrico." Es como tener un tigre domesticado bajo ti, listo para saltar en cualquier momento. Personalmente, eché de menos algo de masa de inercia en el motor de la Husqvarna. El motor siempre me pareció un poco nervioso y agresivo.

Cuando se trata de la dinámica de conducción, ambas motos juegan en ligas diferentes. La Ducati es como un buen compañero de baile: sigue suavemente tus movimientos y te hace lucir bien, incluso si tienes dos pies izquierdos. Perdona errores y simplemente es divertida.

La Husqvarna, en cambio, es como un bailarín profesional: precisa, directa y siempre lista para hacer una pirueta extra. Valentín la compara con la Yamaha XSR 900, otro peso ligero con un motor potente y manejo juguetón. En pistas rápidas, la Svartpilen está en su elemento y hace que la Ducati parezca anticuada. ¡La Husqvarna eleva tu pulso - la Ducati lo baja!

En cuanto a la electrónica, ambas motos están a la altura de los tiempos. Control de tracción, ABS, varios modos de conducción – todo está ahí. Pero la Husqvarna va un paso más allá. Nasty Nils (o sea, yo) estaba impresionado: "Por otro lado, la moto tiene probablemente los mejores sistemas de asistencia al conductor en esta clase y puede competir fácilmente con todas las naked bikes." Es como tener un copiloto invisible que te salva de situaciones peligrosas. La Ducati, en este sentido, es un poco más reservada. Tiene todos los sistemas necesarios, pero se siente menos intrusiva. Esto también se debe a la menor potencia del motor. Los gadgets aquí parecen bastante agradables, pero no son realmente necesarios.

Aquí llegamos al punto que no se puede medir en números: el carácter. La Ducati Scrambler es como el tipo genial del vecindario que siempre tiene una buena historia que contar. Irradia una despreocupación contagiosa. Nuestro colega Wolfgang Weiß lo resume perfectamente: "Al final del recorrido, me enamoré de la Scrambler y desde entonces solo me senté en esta moto." Es una moto que te hace sonreír, incluso si acabas de conducir 14 horas bajo una lluvia torrencial. Por otro lado, la Husqvarna es como el extraño misterioso que entra en el bar y atrae todas las miradas. Tiene un aura de frescura y competencia. Valentin Pokorny comenta: "La Svartpilen 801 es sin duda un caso límite en la categoría. ¿Retrobike? ¡Más bien Nakedbike! Pero creo que la Svartpilen no quiere necesariamente ser percibida como una moto clásica." Es la moto para aquellos que quieren algo especial, algo que no todos conducen en la esquina siguiente.

Después de más de 2500 kilómetros a través de los Balcanes, innumerables curvas, algunas maldiciones y muchos momentos de felicidad, nos encontramos ante un dilema: ¿Cuál moto es mejor? La respuesta es tan insatisfactoria como honesta: Depende.

La Ducati Scrambler 800 ICON es la moto perfecta para todos aquellos que quieren llevar la vida con calma. Es la fiel compañera para aventuras urbanas, paseos tranquilos por carreteras secundarias y para todos los que simplemente quieren relajarse. Es el equivalente a un espresso perfectamente preparado en una tarde soleada en Roma.

La Husqvarna Svartpilen 801, en cambio, es para los pilotos que prefieren lo deportivo. Es la moto para carreteras de montaña llenas de curvas, carreras de aceleración espontáneas y para todos los que también disfrutan de ir al límite. Es como un shot en una fresca noche sueca: fuerte, intenso y no apto para los débiles de corazón.

Al final del día, ambas motos son ganadoras. Muestran cuán diversa puede ser la mundo de las motos retro. Ya sea que prefieras el estilo de vida relajado italiano o la precisa frialdad nórdica, aquí cada uno encuentra su moto perfecta.