BMW R 1200 R 2015 vs. BMW S 1000 R 2020

BMW R 1200 R 2015

BMW S 1000 R 2020
Visión general - BMW R 1200 R 2015 vs BMW S 1000 R 2020

BMW R 1200 R 2015

BMW S 1000 R 2020
Especificaciones técnicas BMW R 1200 R 2015 en comparación con BMW S 1000 R 2020
Comparación de ventajas e inconvenientes
Comparación de ventajas e inconvenientes
BMW R 1200 R 2015

La predecesora ya se podía conducir deportivamente, así como de forma convincente en recorridos, la nueva R 1200 R puede hacer aún más - viajar sigue sin ser un problema gracias al sistema de maletas (con coste adicional, por supuesto), pero domina el deporte aún mejor. Gracias al motor bicilíndrico bóxer, ahora parcialmente refrigerado por agua, es maravillosamente ágil - 125 CV puede no parecer mucho sobre el papel, pero el motor es increíblemente potente y además se comporta de forma cultivada. El chasis y los frenos también puntúan alto y la posición de conducción es deportivamente erguida, cubriendo un amplio espectro que va desde la diversión maravillosa a los largos recorridos. Por desgracia, BMW también entiende perfectamente el truco con la lista de sobreprecio. El modelo básico está bien equipado con ABS desconectable, control antideslizamiento también desconectable y dos modos de conducción, pero muchos trucos interesantes son casi obligatorios y, por supuesto, hacen subir mucho el precio.
BMW S 1000 R 2020

La posición de conducción es deportiva pero en ningún caso incómoda, los frenos son potentes y el motor de la S 1000 R está en su mejor momento, quizás incluso un poco demasiado homogéneo. Tampoco hay nada que criticar en términos de manejo. Basándonos en los datos de rendimiento puros y en las características electrónicas instaladas, la BMW probablemente tiene lo que se necesita para marcar el tiempo de vuelta más rápido. Y eso en cualquier tipo de superficie, porque la suspensión semiactiva permite devorar kilómetro tras kilómetro en carreteras en mal estado plagadas de baches. Desgraciadamente, esta sensación de superioridad nunca se traslada al conductor. Probablemente el inconveniente de un exceso de equilibrio en todos los ámbitos, al menos a mis ojos italófilos. Al BMW le faltaba ese algo, ese carisma que es difícil de explicar pero que despierta emociones genuinas.