Yamaha Tenere 700 Rally 2025 vs. Honda XL750 Transalp 2025

Yamaha Tenere 700 Rally 2025

Honda XL750 Transalp 2025
Visión general - Yamaha Tenere 700 Rally 2025 vs Honda XL750 Transalp 2025

Yamaha Tenere 700 Rally 2025

Honda XL750 Transalp 2025
Especificaciones técnicas Yamaha Tenere 700 Rally 2025 en comparación con Honda XL750 Transalp 2025
Comparación de ventajas e inconvenientes
Comparación de ventajas e inconvenientes
Yamaha Tenere 700 Rally 2025

La nueva Tenere 700 Rally es una fusión del bello diseño de la anterior Rally Edition, inspirada en las antiguas Teneres de los 80 y 90, con los componentes de alto rendimiento de la Tenere 700 Extreme. El chasis KYB de alta calidad y la acertada y revisada ergonomía la convierten en una conquistadora de todas las pistas. Nunca antes había sido posible conducir una Tenere estándar con tanta fuerza y al mismo tiempo con tanto estilo por colinas y valles. Pero también quiere ser conducida deportivamente por el terreno. Un puño del acelerador demasiado cómodo sólo se adapta de forma limitada al chasis rápido y deportivo, y con la elevada altura del asiento, no querrás buscar el contacto con el suelo con las piernas demasiado a menudo. Sin embargo, los adeptos a la conquista de pistas off-road pueden divertirse mucho con la nueva Tenere 700 Rally. Las nuevas características electrónicas no disminuyen en absoluto este placer de conducción.
Honda XL750 Transalp 2025

La esencia de la Honda XL750 Transalp no ha cambiado completamente con la revisión para 2025, sigue gestionando el acto de equilibrio entre diferentes disciplinas del motociclismo y brilla allí donde no se vuelve demasiado extrema. Sus mayores puntos fuertes son su bajo peso y la facilidad de manejo resultante. El motor es una unidad realmente potente y la gestión del motor está bien afinada, pero el bicilíndrico en línea podría ofrecer un poco más de garra desde abajo. La suspensión ha sido mejorada, los frenos ofrecen mucho confort y manejan todas las situaciones de conducción moderada con facilidad, pero las curvas despiadadas o los terrenos abruptos todavía no le sientan del todo bien. Sin embargo, la misión de la Transalp no es ganar carreras o rallies, sino llevar con confianza por el mundo a los conductores de a pie y a los que recorren largas distancias. Y lo consigue. Sólo una cosa duele aquí: La falta de control de crucero.