Prueba de viaje de la Suzuki GSX-S1000 GT 2024

La Suzuki GSX-S1000 GT ya tuvo que demostrar su valía en el circuito y en los altos pasos alpinos. Esta vez, sin embargo, fue probada en un verdadero secreto para los motociclistas: la zona fronteriza entre Mühlviertel y Waldviertel. Esta región en el norte de Austria ofrece un paisaje pintoresco de suaves colinas, verdes paisajes y carreteras llenas de curvas – un verdadero Eldorado para los motociclistas, que invita a acelerar y disfrutar lejos de los conocidos pasos alpinos.

Nuestra base para este tour fue el Hotel de Motociclistas MoHo Rockenschaub en Liebenau, cuyo propietario es un apasionado motociclista. Gracias a sus consejos sobre rutas, pudimos experimentar la versatilidad de la región: desde largas curvas fluidas hasta desafiantes curvas cerradas, pasando por superficies en mal estado que pusieron a prueba la calidad del chasis. También nos acompañaron la nueva Suzuki GSX-S1000GX, Suzuki V-Strom 1050, BMW R 1300 GS y la también nueva BMW S 1000 XR.

La Suzuki GSX-S1000 GT está equipada con un probado motor de cuatro cilindros en línea de 999 cc, que entrega 152 CV y 106 Nm de par. El peso con depósito lleno es de 231 kilogramos, y la altura del asiento es de agradables 810 milímetros. El chasis cuenta con una horquilla invertida de 43 mm completamente ajustable en la parte delantera, así como un amortiguador ajustable en la parte trasera, que permite ajustar el rebote y la precarga del muelle. Los neumáticos tienen un diseño deportivo: 120/70 R17 en la parte delantera y 190/55 R17 en la trasera.

En términos de electrónica, la GT se presenta sólida, aunque no revolucionaria. Entre los aspectos destacados se incluyen un control de tracción ajustable en varias etapas y ABS, diferentes mapas de acelerador, así como un control de crucero. Sin embargo, faltan los puños calefactables, lo que podría ser una desventaja en recorridos largos a temperaturas más frías. Además, no se encuentra un sensor de inclinación en la GSX-S1000GT. Hoy en día, incluso muchas motos A2 ya ofrecen ABS en curvas y controles de tracción dependientes de la inclinación, por lo que Suzuki debería mejorar esto en la próxima actualización de la GT. Sin embargo, el concepto de manejo de Suzuki se encuentra entre los más simples e intuitivos del mercado de motocicletas.

La Suzuki GSX-S1000 GT ofrece un equilibrio logrado entre deportividad y confort. Gracias al manillar recto y ancho, la posición de conducción no es demasiado deportiva, pero tampoco demasiado erguida, lo que permite una orientación hacia la rueda delantera sin ejercer demasiada presión sobre las muñecas. Para los pilotos más altos, se recomienda el asiento de turismo del programa de accesorios, que hace más agradable el ángulo de la rodilla, que de otro modo sería algo agudo. La protección contra los elementos es sólida. Las piernas están protegidas por el carenado bastante ancho, mientras que en la parte superior, el parabrisas no ajustable ofrece una protección contra el viento aceptable, pero completa solo en una postura ligeramente inclinada. El consumo de 6,2 litros por cada 100 kilómetros en conducción mixta no es realmente económico, pero es razonable considerando el motor de cuatro cilindros en línea K5 derivado de la competición, y permite, en combinación con el depósito de 19 litros, una autonomía de aproximadamente 300 km.

A pesar de su carácter esencialmente deportivo, el motor de la Suzuki GT también ofrece un alto nivel de confort en largas distancias. Para un cuatro cilindros, el motor tiene un empuje considerable ya desde la mitad del rango de revoluciones, pero aún así gira de manera típicamente sedosa y suave a través del rango de revoluciones. Esta combinación da como resultado un motor con el que se puede viajar relajadamente por la autopista a altas velocidades, o deslizarse a bajas revoluciones en sexta marcha por zonas urbanas.

Una vez que la última señal de la ciudad desaparece del campo de visión, solo se necesitan dos o tres cambios con el quickshifter que funciona excelentemente, y la GT se lanza acompañada del agresivo rugido del K5 hacia las curvas. Demasiado rápido, la máquina se impulsa a velocidades que pueden ser problemáticas legalmente, lo cual se ve acentuado por la relación de transmisión bastante larga. Sin embargo, gracias al empuje disponible desde temprano, la GT necesita ser exprimida menos que muchas motos deportivas comparables con motor de cuatro cilindros en línea.

Puede que no sea una moto deportiva pura, pero convence con su conducción ágil y su potente motor. El manillar ancho permite un control preciso, aunque el comportamiento al girar puede parecer inicialmente un poco lento. Sin embargo, se inclina de manera muy armoniosa y predecible en las curvas, lo que infunde confianza. Gracias a la posición de conducción orientada hacia la rueda delantera y al buen chasis, se obtiene un feedback bastante claro del nivel de grip. Bajo una carga mayor en curvas rápidas y en carreteras irregulares, la suspensión Showa muestra ligeras debilidades, especialmente en la parte trasera. Esta no sigue el ritmo de la amortiguación y tiende a oscilar ligeramente. Aquí, un amortiguador de repuesto con ajuste de compresión proporcionaría una solución.

La Suzuki GSX-S1000GT es un impresionante sport touring que combina hábilmente deportividad con confort para largas distancias. El potente motor y la ergonomía, perfectamente situada entre el deporte y el turismo, son las grandes fuentes de alegría de la GT. Además, cuenta con una electrónica fácil de usar y un confort en el asiento bastante bueno para un sport touring. El chasis funciona de manera aceptable, aunque podría beneficiarse de un poco más de amortiguación en la parte trasera. Para los viajeros con ambiciones deportivas que también desean disfrutar de trayectos más largos, la Suzuki GSX-S1000GT es un paquete muy completo y una recomendación clara.